La terapia puede beneficiar a:





Niños que presentan algunas de las siguientes características:
- Problemas de atención y concentración
- Dificultades de aprendizaje
- Alteraciones en el tono muscular
- Retraso en el habla y en el lenguaje
- Dificultades emocionales y conductuales
- Retrasos madurativos y del desarrollo
- Dificultades en el juego y en la socialización
- Niños que han padecido una falta de estimulación (niños adoptados, con largas hospitalizaciones y niños en situación de riesgo)
- Dificultades para funcionar en el colegio y en las actividades de la vida diaria
Niños que presentan un diagnóstico específico:
- Disfunción en el procesamiento sensorial
- Trastorno por Déficit de Atención (con y sin Hiperactividad)
- Trastorno Generalizado del Desarrollo (Síndrome de Asperger, Autismo y otros)
- Dispraxia
- Síndrome de Down, Síndrome de Williams, Síndrome X-Frágil y otros síndromes.
- Parálisis Cerebral
- Discapacidad Sensorial
- Otros diagnósticos